Huella hídrica y esparcimiento

Por Maria Fabienne Viola Solís

Todas nuestras actividades tienen impactos en el planeta. Estos impactos pueden ser grandes, pequeños, positivos o negativos y hay muchas maneras de contabilizarlos. Una de estas herramientas es midiendo nuestra huella hídrica.

La Comisión Nacional del Agua de México la define como “toda el agua que utilizamos en nuestra vida diaria; para producir nuestra comida, en procesos industriales y generación de energía, así como la que ensuciamos y contaminamos a través de esos mismos procesos”.

No entramos en contacto con el 96% del agua que utilizamos

Frecuentemente pasamos por alto el hecho de que todas las actividades que realizamos y los productos que utilizamos requieren de agua en algún momento. Las actividades cotidianas como bañarnos, lavar nuestra ropa o regar nuestros jardines ocupan sólo el 4% de nuestra huella hídrica total. Esto quiere decir que no entramos en contacto con el 96% del agua que utilizamos.[Ver[1]]

Ese dato puede hacer que te preguntes en qué cosas se utiliza toda esa agua. ¡La curiosidad es el primer impulso hacia un cambio positivo! Afortunadamente, existen muchas opciones para calcular la huella hídrica, ya sea de tu estilo de vida en general o de aspectos específicos como la ropa o la alimentación. Algunos ejemplos son:

En esta ocasión queremos hablarte sobre la huella hídrica de algunas actividades recreativas o hobbies. Tal vez al principio te parezca difícil cambiar las cosas que consideramos tan básicas como la comida o la ropa, pero si agregamos el componente de la diversión podemos animarnos a salir de nuestra zona de confort para ayudar al planeta.


Deportes

El tamaño de un campo de golf corresponde a entre 60 y 100 canchas de futbol. Ambos deportes necesitan de un riego constante para mantener los campos en condiciones óptimas de juego. En zonas secas, una cancha de fútbol necesita aproximadamente de 162,926 galones de agua al año. Lo que significa que, a su vez, un campo de golf puede consumir entre 9.8 y 16.3 millones de galones en un año (el equivalente a 20 piscinas olímpicas).

Mantenerse activo es sumamente importante en cualquier etapa de la vida y las opciones para logarlo son casi infinitas. Puedes agregar a tu rutina actividades que te hagan sentir en contacto con la naturaleza, como caminar, trotar o correr en un parque o entrenar en un gimnasio de escalada para después ponerte a prueba en la naturaleza.

Si prefieres una actividad física que también tenga un impacto inmediato en tu estado de ánimo puedes probar una actividad relajante como el yoga; o algo divertido como tu tipo de baile favorito para mejorar tu humor y ayudarte a desenvolverte.

 

Lectura

Según el Instituto para la Educación sobre el Agua de la UNESCO, la huella hídrica de un papel tamaño A4 es entre 2 y 13 litros, dependiendo de diversos factores. Esto quiere decir que una novela impresa en un papel estándar tamaño A5 de 200 páginas requirió entre 200 y 1,300 litros.

Una forma para reducir este consumo es buscando librerías que se enfoquen en ejemplares de segunda mano. Esto le da una segunda vida a los libros, te permite encontrar cosas únicas e inesperadas y puede hacer que conozcas lugares y personas nuevas en tu ciudad.

Otra idea es organizarte con amigos y familiares para prestarse o regalarse materiales interesantes. Es una actividad que ayuda a estrechar estos lazos tan importantes, ya que les da más temas de los cuales conversar, es una oportunidad de intercambiar ideas y opiniones, lo que les permite conocerse mejor.

 

Paseos

Actualmente, un lugar predilecto para pasar el tiempo libre son los centros comerciales. Estos espacios tienen ofertas para todo tipo de intereses y presupuestos, desde comida hasta electrónicos, pasando por ropa, cosméticos y artículos para el hogar. Sin embargo, si hiciste las pruebas de huella hídrica habrás constatado que estos productos requieren de grandes cantidades de agua para su fabricación y transporte.

Seguramente en tu ciudad hay excelentes alternativas para un paseo fuera de lo común. Por ejemplo, descubrir museos, teatros y galerías, asistir a conciertos y exposiciones de artistas locales o buscar proyecciones de películas extranjeras, clásicas o artísticas. Todas estas son opciones que expandirán tus horizontes y evitarán expandir tu huella hídrica con productos que tal vez no necesitas realmente.

 

La conservación del planeta necesita creatividad

La lucha por la conservación del planeta necesita creatividad y disposición, lo que también puede abrirnos puertas inesperadas y develar posibilidades emocionantes. Si nos abrimos al cambio, poco a poco podremos conquistar grandes metas, sin dejar de disfrutar del camino.  

1

https://www.conagua.gob.mx/CONAGUA07/Contenido/Documentos/Infograf%C3%ADa%20Huella%20H%C3%ADdrica.pdf